TODO LO DEL POBRE
ES ROBADO
Con la sutil estrategia de sembrar dudas entre la opinión sobre los posibles nexos existentes entre el lavado de activos del narcotráfico y el sostenido aumento de las remesas, el presidente de la ANDI, Luís Carlos Villegas, plantea al gobierno crear un impuesto adicional a los giros de los conciudadanos que desde el exilio ayudan a mantener la precaria economía de sus familiares en Colombia.
Olvidando así el señor Villegas las innumerables dificultades que tienen que sortear nuestros transnacionales para ganarse honradamente esos dólares, euros o yenes.
Recordemos que aquellos que salen del país lo hacen tratando de huir de las dificultades que existen en materia de seguridad, por amenazas contra su vida, por necesidad de empleos mejor remunerados, y por infinidad de razones contrarias a su voluntad misma; no lo hacen por gusto ni por placer.
Vergonzosamente somos el segundo país después de Etiopía, con mayor número de desplazados.
Pero de semejante esfuerzo - que inicia con la consecución del dinero prestado para la gestión del pasaporte, la diligencia de tramitación de la visa, y finalmente la obtención del tiquete – jamás se han enterado el señor industrial y los grandes economistas del estado, quienes cuya única preocupación radica en cómo adquirir beneficios y dividendos a costa de la necesidad de los compatriotas exiliados.
En lugar de perseguir a los Colombianos que hacen patria y que se esfuerzan en construir sus sueños desde tierras lejanas, aportándole a la economía nacional unos recursos que permiten a millones de familias continuar subsistiendo, el gobierno debería preocuparse más, por ayudar a solucionar los múltiples conflictos que aquejan a esos hermanos que solo son tenidos en cuenta en los días previos a las elecciones a congreso y a la presidencia.
Ojala que tales cargas impositivas a los limitados recursos que giran estos Colombianos a sus hijos, madres y espos@s, no se hagan efectivas y que por el contrario se les brinde un apoyo y acompañamiento efectivo en materia de trámites, educación, preparación para el trabajo, vivienda, ahorro, inversión y seguridad social.
Porque queremos que algún día vuelvan con nosotros!.
http://www.douglasporlaverdad.blogspot.com/
Con la sutil estrategia de sembrar dudas entre la opinión sobre los posibles nexos existentes entre el lavado de activos del narcotráfico y el sostenido aumento de las remesas, el presidente de la ANDI, Luís Carlos Villegas, plantea al gobierno crear un impuesto adicional a los giros de los conciudadanos que desde el exilio ayudan a mantener la precaria economía de sus familiares en Colombia.
Olvidando así el señor Villegas las innumerables dificultades que tienen que sortear nuestros transnacionales para ganarse honradamente esos dólares, euros o yenes.
Recordemos que aquellos que salen del país lo hacen tratando de huir de las dificultades que existen en materia de seguridad, por amenazas contra su vida, por necesidad de empleos mejor remunerados, y por infinidad de razones contrarias a su voluntad misma; no lo hacen por gusto ni por placer.
Vergonzosamente somos el segundo país después de Etiopía, con mayor número de desplazados.
Pero de semejante esfuerzo - que inicia con la consecución del dinero prestado para la gestión del pasaporte, la diligencia de tramitación de la visa, y finalmente la obtención del tiquete – jamás se han enterado el señor industrial y los grandes economistas del estado, quienes cuya única preocupación radica en cómo adquirir beneficios y dividendos a costa de la necesidad de los compatriotas exiliados.
En lugar de perseguir a los Colombianos que hacen patria y que se esfuerzan en construir sus sueños desde tierras lejanas, aportándole a la economía nacional unos recursos que permiten a millones de familias continuar subsistiendo, el gobierno debería preocuparse más, por ayudar a solucionar los múltiples conflictos que aquejan a esos hermanos que solo son tenidos en cuenta en los días previos a las elecciones a congreso y a la presidencia.
Ojala que tales cargas impositivas a los limitados recursos que giran estos Colombianos a sus hijos, madres y espos@s, no se hagan efectivas y que por el contrario se les brinde un apoyo y acompañamiento efectivo en materia de trámites, educación, preparación para el trabajo, vivienda, ahorro, inversión y seguridad social.
Porque queremos que algún día vuelvan con nosotros!.
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