jueves, 4 de octubre de 2007

BARÚ UN PARAÍSO FERIADO




Detrás del inusitado y rocambolesco espectáculo cuasiambientalista de la posibilidad de instalar un puerto carbonífero en las playas más bellas del continente, se esconde el juego de la legalización del complejo turístico más grande del país, casi que ambientado por este trizte y cuidadosamente planeado estratagema.
El cuento de dirigir toda la opinión del país a botar corriente sobre si es conveniente o no hacer semejante engendro de obra contaminante, impide ver con acierto lo que se esconde detrás de toda la mediatez de la noticia, y es que estamos todos apostándole a la teoría de impedir que se realice el puerto contaminante para que así se pueda llevar a cabo el megaproyecto hotelero de los señores que se han ido adueñando de la isla, (Cia. comercial promotora de turismo las palmas, y Prime Value Service S.A.)con Julio Mario Santodomingo a la cabeza. Que miopía y que absurdo que se niegue ahora el permiso ambiental a una obra como el puerto para exportar carbón, (Elemento natural) y en cambio sí se le otorgue el permiso a un megaproyecto de más de 400.000 metros cuadrados de alojaminetos y centros comerciales para recibir cruceros llenos de gringos decrépitos en busca de "acción", acaso nos pretenden vender el cuentico ese de que lo que los motiva es mejorar la calidad de vida de los 17.000 nativos, negritos y negritas que adornan ese paraíso y que obtiene su sustento del turismo racional y mochilero?; nos van a embaucar con el embustero pretexto de que 5 hoteles cinco estrellas van a ser usados por nosotros los Colombianos de a pié?, no nos crean tan pendejos. Playas privadas, excluyentes y guardas armados que impidan que los nativos se acerquen a los turistas y màs discriminación y desempleo, prostitución y drogas es lo que generan estos díscolos desarrollos turísticos, más la contaminación de miles de extranjeros borrachos, orinando y cagando por todas partes... claro ,como ya se tiraron a cartagena ahora sigue la depredación hacia las pardisíacas playas de barú (Playa blanca incluída), acaso la del turismo no es una de las actividades comerciales más contaminantes del planeta?....deberíamos impedir semejantes iniciativas y declarar a Barú como un Santuario natural o un patrimonio del planeta, dado su importante papel en el mantenimiento de ecosistemas altamente complejos y frágiles tanto como sus prístinas aguas verdeazulosas, sus mujeres negras (Las más bellas de su raza en todo el país) sus arenas blancas y suaves.
No nos pongan a escoger entre polvillo de carbón o turistas inmundos, a la larga son igual de nocivos para la biodiversidad y el frágil y sutíl equilibrio de la biosfera de ese lugar que junto a Caño Cristales y el Valle de Cocora son los destinos más aluciantes del planeta, y son nuestros, de TODOS los Colombianos, y han estado allí salvaguardados para nosotros por sus ilustres nativos y verdaderos dueños.
No nos crean tan pendejos!