viernes, 1 de febrero de 2008

LOS CUATRO DEL PATIBULO

A PROPOSITO DE LOS AMIGOS DE ABAJO...

Muy bueno lo que denuncian pero parecieran estar asumiendo la defensa a priori de un exalcalde chamuscado con pretensiones senatoriales. Ojalá que no sea por heridas políticas abiertas la motivación última de sus artículos, dicho de otra manera, más vale que la supuesta independencia que dicen defender sea realmente sentida y duradera, la oposición reflexiva siempre deberá ser ejercida por gente seria y sin matricula partidista. En hora buena aparecieron los cuatro mosqueteros de la tarde a escribir sobre lo divino y lo humano, que dicha fuera que se sumaran a las voces de los que no hacemos parte de las intestinas roscas del pseudoperiodismo criollo y permitieran espacios de discenso en los magazines y periódicos locales para expresar las ideas libertarias de quienes no tenemos voz ante los ciudadanos de a pie, ojalá la directora de La Tarde, doña Sonia, quien se ufana de ser tan Humanista entre corredores y cocteles, hiciera una convocatoria a aquellos que sedientos de papel esperamos una oportunidad para servir al difícil oficio de la ecritura sin pretenció mayor a la de expresar posiciones que no siempre tienen que ser opuestas a las del régimen. Que tristeza que hayamos perdido la imparcialidad y la postura frente a la polarización actual impulsada entre otros por los medios de comunicación al servicio de "la Patria" (Eufemismo acuñado y recuñado por el señor presidente para enarbolar las banderas del patrioterismo criollo y popular).

El unanimismo conceptual e ideológico emprendido por las oligarquías narcopolítiqueras de moda, en manguala con los monopolios económicos que desde siempre han cogobernado con las mafias locales y ahora transnacionales, limitan peligrosamente cualquier posibilidad de opinión divergente con el "stablishment".

Parafraseando a Charly García, "No voy en tren voy en avión, no nececito a nadie a nadie alrededor..."

Dejen gobernar al moreno, apenas comienza, y esos truculentos casos de descarado nepotismo, se ven hasta en las mejores familias, o sino miren quienes están ocupando las embajadas de Colombia en el planeta... relax, señores, que la envidia es mejor despertarla que sentirla, y lo malo de la roscas es no estar en ellas.

La traquetización del pais no comenzó en enero, lleva muchos presidentes a la espalda, y no se debe comenzar la cacería con el alcalde o el gobernador de turno solo por que no representa mis intereses, o los de mi grupo, a caso la de Juan Manuel fué una alcaldía diáfana y constructiva?, qué les pasa?.

Sonia, espero mi columna, ya no estoy aspirando, no existen excusas, seguiré insistiendo.




COLUMNISTAS DE LA TARDE


Date: Fri, 1 Feb 2008 07:30:15 -0500
From: pereiragamba@gmail.com
To: dpardo@soho.com.co
Subject: Al Alcalde de Pereira le está yendo muy mal


Repartiendo los potreros


Eduardo González Villegas
egovi@telecom.com.co
24/01/2008
Los hacendados Tamayo y Londoño se reunieron con sus mayorales y decidieron cómo iba a ser la repartición de los potreros en los que pastamos nosotros, los semovientes: Señores –les dijeron- muchas gracias por habernos ayudado a comprar estas fincas. En contraprestación, y cumpliendo lo que acordamos a la hora de las negociaciones, les vamos a entregar los potreros para que los usen como a bien tengan. Durante los próximos cuatro años Ustedes tendrán sobre ellos todos los derechos y, por supuesto, entre ellos está el de explotarlos para su provecho propio. Miren a ver a quiénes van a llamar en calidad de mayordomos y mayordomas. No importa si son o no buenas personas. Mucho menos si están o no capacitados para el manejo de los potreros. Ustedes despreocúpense y gócense el poder, que para eso somos los nuevos dueños de las haciendas. Al vecino Carmona –siguieron diciendo- le entregamos los potreros que llamamos Indeportes, Desarrollo Agropecuario, Infider, Empresa de Energía, Instituto de Cultura, Control Físico y Empresa de Aseo. Para el colega Merheg van los siguientes potreritos: la Secretaría de Educación, la de Salud, Telecafé, la Secretaría de Desarrollo Social, Aguas y Aguas y la asesoría de Comunicaciones. Al mayoral Ramírez le otorgamos los potreros Promotora de Vivienda y Aeropuerto Matecaña. Es poquito, pero carnudo.

Para el finquero Soto son los potreros que llamamos Secretaría de Gobierno, de Planeación, de Infraestructura,de Servicios Administrativos, la Promotora y Megabús… Y así siguió la dadivosa entrega de los potreros, con nosotros, los semovientes, en el medio.

Tras la repartición, nosotros, los semovientes, quedamos a la expectativa de lo que va a pasar con la tierrita, y sin que tengamos (aun) suficientes argumentos para descalificar a los nuevos administradores, la verdad es que temblamos de miedo cuando vemos algunos de los nombres de quienes nos van a manejar durante el cuatrienio. No renunciamos a la esperanza de que los mayordomos y las mayordomas administren los potreros sin dañarlos mucho y sin llevarse los pastos, las piedras, los bebederos, el alambre de púas, los estacones… mas, con sólo ver ciertas hojas de vida ya sabemos que la cosa no va ser fácil. Aunque hay mayordomos con idoneidad ya probada (como el doctor Jorge Alexis, por citar un ejemplo) también es cierto que en la lista hay más politiqueros que técnicos y más comodines que calificados administradores de la cosa pública. Además, aunque los mayordomos y las mayordomas sean buena gente, son los mayorales los que están detrás de sus cargos y gestiones, y varios de ellos tienen un pasado que no es garantía de transparencia. Hasta pasado judicial hay por ahí, lo cual tiene sin cuidado a los hacendados.

Si las fincas Risaralda y Pereira ya venían dando tumbos con algunos mayorales de los de ahora detrás, esta nueva repartición no parece ser la que nos vaya a sacar del errático camino. Al menos no sobre el papel. Y ojalá nosotros, los semovientes, estemos equivocados.

Ojalá dentro de algunos meses tengamos que aplaudir la gestión, el desinterés, la creatividad, la honradez, la capacidad de escucha, la vocación de servicio, la entrega y las ejecutorias. Mugiríamos y brincaríamos en una pata de la dicha porque los potreros estarían bien y nosotros mejor. Ojalá suceda. Ojalá. Ojalá. Aunque… quién sabe.




De padrinos y gabinetes


Juan Antonio Ruiz Romero
ruizromeroja@hotmail.com
24/01/2008
En su inocencia y desconocimiento de los recovecos de la política, la primera dama del municipio, Patricia Elena Acosta, proclamó a su esposo Israel como padrino del elefantito que nació hace un poco más de un año en el zoológico Matecaña.

Y es que hablando de padrinos, hay dirigentes de nuestra ciudad con maestría, doctorado y especialización en la elección y "gestión" para el nombramiento de sus familiares en los cargos públicos. Mucho se habló, en su momento, de la elección de la esposa del senador Merheg, Juliana Enciso como diputada; de la hija de la concejal Judith Giraldo, Elena Salazar, escogida para la Asamblea departamental y de la esposa del ex parlamentario Carmona, Vivián López, quién alcanzó curul en el Concejo de Pereira. Pero, estos son solo algunos de los casos más visibles. El mismo Carmona ubicó a su suegro actual, Germán López, en la Dirección de Cultura del departamento y colocó a su ex esposa, Ly Giraldo, en la gerencia de la Empresa de Energía de Pereira.

Otro que mantiene muy buenas relaciones personales con su ex pareja, es el retornado concejal de Pereira Adolfo Arturo Carvajal, quién recomendó a su ex mujer Luz Amparo Zapata para la Secretaría de Gestión Inmobiliaria. Y hay más ejemplos de armonía familiar y conyugal en los cargos públicos. Como cuota política de Luis Carlos Ramírez, director de El Diario del Otún, su esposa Adriana Wolf ha pasado por las gerencias de Telecafé, Multiservicios, la Empresa de Energía y ahora, de nuevo, al frente del aeropuerto Matecaña.

Por ese mismo camino de permanecer juntos: "en la salud y en la enfermedad, en la alegría y en la tristeza, en la riqueza y en la pobreza" y faltó agregar en los cargos públicos, hay algunos ejemplos: El ingeniero José Jaime Torres, nuevo Secretario de Planeación de Dosquebradas y su esposa, la gerente de Megabús Mónica Vanegas; el secretario de Desarrollo Económico del departamento Javier Monsalve Castro y su esposa Juliana, que trabaja en Planeación municipal de Pereira.

La hoy mandataria dosquebradense Luz Ensueño Betancur "gestionó" la designación de su hermano Carlos Augusto como Secretario de Obras Públicas de Risaralda, para no desentonar con el ex alcalde Uberney Marín, quién durante su mandato tuvo a su hermana como secretaria de Educación del departamento. Y la hoy senadora Elsa Gladys Cifuentes, luego de que fracasara en el intento de que su hermano fuera elegido concejal de Pereira y su sobrino diputado, se contentó con que su hermana Stella se desempeñe como Asesora de Control Interno de la Alcaldía de Dosquebradas.

Por su parte, el ex alcalde de Pereira y mentor del actual mandatario, César Castillo, "tramitó" el nombramiento de su sobrina Catalina López Castillo en el cargo de Asesora privada del alcalde Israel Londoño.

Otro dirigente que piensa que "la caridad empieza por casa" y también los puestos públicos, es el abogado Benjamín Herrera, quién "recomendó" a su hijo James para la dirección del Instituto Municipal de Tránsito de Pereira.

Y, entre quienes han confiado a sus hijos la continuidad de la sangre conservadora en el sector público se encuentran el ex senador Jaime Escobar, con su hijo Álvaro, en el Concejo de Pereira; el ex congresista Alberto Zuluaga con su hijo Andrés Felipe en la Secretaría Administrativa del departamento y el ex secretario de Hacienda Bernardo Gil, con su heredero Carlos Andrés, en la Dirección de Turismo de Risaralda.

Luego de conocer a algunos de los padrinos de la política en el departamento, se podrían sugerir varios nombres para bautizar al nuevo elefantito del Zoológico Matecaña: Octavio, Habib, Luis Carlos, César, Benjamín o Bernardo. Aunque pensándolo bien, el animalito no tiene la culpa.




¿Prolongar su agonía?


Fernando Agudelo Velasco
editorial@latarde.com
26/01/2008
Las recientes declaraciones de la nueva Gerente de la Empresa de Energía, quien parece que aprendió a pasmosa velocidad del sector en que se mueve, son la peor noticia que los ciudadanos de esta ciudad podemos recibir sobre tan espinoso asunto. Son la prolongación de una agonía que empezó hace años con un enfermo que no reacciona ante ninguna de las tímidas terapias que le han administrado.

Ahora se habla de tres posibles caminos. Veamos:

a) Liquidación Financiera. No sabemos de qué se trata ¿Será que entregan a los jubilados parte de la red o una generadora? ¿Y a los demás acreedores lo que sobre?

b) Inyección de Recursos. ¿De quién? ¿Del Municipio? Pero si no tiene peso según lo afirma el nuevo Alcalde. ¿O piensa vender la Telefónica que sí produce plata para metérsela a Energía? Nos resistimos a pensar en tamaña majadería. Porque la empresa no necesita solo plata. Esta, hasta la podríamos conseguir. Lo que se necesita es gestión. Administradores expertos y prudentes. No fichas políticas emparentadas con gamonales del espectro político regional.

El dinero que le coloquen, se va por el roto. A los pereiranos no nos pueden hacer esta jugada perversa.

Y la última, la capitalización. No dicen si es la actual con socio estratégico o con otra figura. Ya sabemos que con socio estratégico no les gusta. ¿Entonces qué es lo que quieren? Y aquello que también leímos, de esperar a ver cómo se comporta la empresa con la nueva administración, es un paso demasiado arriesgado porque la empresa está cerquita de una intervención lo que significaría su muerte. Lo que menos tenemos es tiempo. A la CHEC no le han otorgado las garantías que exige por que las anteriores se vencieron, para el pago de una reclamación de dicha empresa por energía reactiva. ¿Sabrá la nueva gerente, que es eso? ¿Se le debe plata a XM? ¿Sabrá la gerente a qué nos referimos? Porque si le deben, la situación es más grave.

Cuando estas líneas vean la luz pública ya habrá tenido lugar una charla nuestra con el Dr. Gabriel Viveros, Gerente de la Promotora de Desarrollo, verdadera dueña de la Empresa y persona en quien, por su experiencia financiera, que no en el sector eléctrico, tenemos puestas nuestras esperanzas. Ojalá destrabe la posición terca mantenida hasta ahora con una empresa cuya enfermedad está sobrediagnosticada, al igual que el tratamiento al cual debe someterse. Nosotros estamos convencidos de que el camino correcto es reabrir el proceso con los cambios que consideren deben hacérsele a los pliegos. Pero lo otro es buscar el ahogado aguas arriba. Los mantendremos informados.



Gobernantes y censores


Gustavo Colorado Grisales
editorial@latarde.com
28/01/2008
Cuando se limitan al aspecto meramente retórico de la cuestión, nuestros gobernantes suelen extenderse en floridas declaraciones sobre " el papel incuestionable de la libertad de prensa en la consolidación de los valores democráticos". El problema es que ese entusiasmo dura mientras los periodistas y los medios se dediquen a ensalzar al soberano o al menos a hacerse los de la vista gorda frente a las debilidades de su gestión. En ese caso podrán ser objeto de palmaditas en el hombro y hasta de condecoraciones por el mérito impagable de no decir nada. Porque a partir del momento en que el periodista empieza a hacer uso de la propia voz para señalar las lacras de la sociedad empieza a convertirse con inusitada rapidez en un sujeto incómodo, cuando no en un peligro para la institucionalidad.

Todavía conservamos fresco el recuerdo de los primeros días de gobierno del presidente Uribe y de su incendiario ministro Fernando Londoño, cuando amparados en el discurso de la "lucha contra el terrorismo" puesto en marcha por la administración Bush después del atentado contra las torres gemelas, estuvieron a punto de revivir la nefasta figura del delito de opinión, como una manera de controlar y, en caso de ser necesario, de arrojar el estigma sobre los opositores. Fracasada la tentativa, el presidente y sus voceros se consagraron entonces a recomendar prudencia a los periodistas, a reconvenir en público a quienes preguntaban más de la cuenta y a disfrazar con el abuso de diminutivos lo que en realidad era un sartal de amenazas veladas. "Mijito, es mejor que no siga investigando ese asuntico, porque se puede meter en problemitas", era y sigue siendo la consigna del establecimiento. Bien conocidos son los casos de los periodistas Fernando Garavito y Daniel Coronel, exiliados en su momento por ejercer sin tapujos ese oficio necesario para edificar cualquier posible forma de civilidad.

Llegados al caso de la ciudad de Pereira, asistimos a una peculiaridad: al talante censor que caracteriza a los gobernantes de todos los lugares de la tierra se suma el hecho, fatal para una actividad que precisa independencia, de que el mayor porcentaje de la pauta publicitaria en nuestro medio proviene del sector oficial, circunstancia que es aprovechada por alcaldes, gobernadores, secretarios y gerentes de institutos descentralizados para arrojar una velada mordaza basada en una ecuación tan elemental como contundente: el monto de la inversión dependerá en buena medida de la posición que adopten medios y periodistas frente a la gestión del funcionario en cuestión. Cuanto menos independientes sean, mayores serán los ingresos, parece ser la consigna.

Una variante de ese fenómeno se ha podido sentir en algunas expresiones del actual alcalde de Pereira, que no le hacen nada bien ni al periodismo, ni al ejercicio de lo público en la ciudad y mucho menos a una persona que se ha caracterizado por un espíritu abierto y conciliador. Primero fue durante la campaña, cuando cuestionado sobre el monopolio que sus aliados políticos Octavio Carmona, Habib Merheg y Carlos Enrique Soto ejercerían en el destino de la ciudad se salió de casillas en los micrófonos de Ecos 1360. Ahora vuelve a suceder, concretamente frente al periodista Johny Vásquez del noticiero local de RCN quien, documentos en mano, le preguntó sobre los cuestionamientos a su secretario de gobierno, ante lo cual el mandatario se despachó con una homilía, invitando al periodista a no perder el tiempo con esas cosas y "a ser más propositivo" olvidando que entre sus funciones no está la de decirle lo que tienen que hacer a quienes en el ejercicio de su trabajo deben entregarle a la comunidad elementos de juicio que le permitan interpretar la realidad. Está bien que en la última etapa de su vida política el alcalde se matriculó en el uribismo pero no por eso tiene que andar imitando a su inspirador en esa tónica de regañar a los periodistas que va en contravía de lo que propuso durante su campaña: ni más ni menos que una ciudad donde quepamos todos.